Aspecto de la asamblea anterior a la pitada

 

 

 

 

 

 

La pancarta de los 6 sindicatos ante la delegación del gobierno

El viernes, y con un calor de órdago, nos juntamos unas trescientas personas para manifestar nuestra indignación ante las puertas de la delegación del gobierno por sus injerencias manifiestamente politizadas, en nuestros acuerdos. Hoy lunes, y “gracias” a sus anhelos de fastidiar la libre negociación, en materias de horarios y permisos, nos vemos abocados a cumplir las cautelares que un juez ha impuesto hasta la celebración del juicio que decida si podemos o no podemos seguir con acuerdos asentados en tiempos muy pretéritos en nuestros pactos.

Gracias señor Gustavo Alcalde, gracias por su magnífica salvación de su patria al impedirnos tener un día de fiesta cuando se casen nuestros hijos, o porque nos den unos días de fiesta tras desarrollar más de 15 años de labor continua en esta casa, o por obligarnos a trabajar sin dedicar un tiempo a la formación que ayude a tener más conocimientos. Usted quiere marcarnos los tiempos y los esfuerzos para suplir su prohibición, la de usted y la del gobierno que representa, de poder contratar compañeros y compañeras que cubran la de cientos de vacantes producidas en los últimos años.  Usted quiere que trabajemos más y cobremos menos.

A nosotros y nosotras nos gustaría que usted y su partido ingresaran las filas del paro. Usted tiene que ser despedido por su ineptitud, por su desprecio de lo público, por su apoyo a las tesis antiobreras y neoliberales que hacen desde sus cómodos sillones.

¡¡Váyase señor Gustavo!!