Ayer un enorme chopo cayó sobre el tejado del edificio central del cdm Movera, afectando al material del que está hecho dicho tejado y que no es otro sino de uralita.

CGT ya pidió hace meses que se estableciera un protocolo de actuación sobre ese tejado, que al ser de uralita, podía ocasionar un grave riesgo en caso de romperse o sufrir algún tipo de incidencia. Fruto de esa petición fue el establecimiento de todo un protocolo de actuación ante hechos como el de ayer. El amianto y sus consecuencias no son ninguna broma, y con esa visión, CGT ya hizo los deberes, junto al servicio de prevención. Ahora pasa por seguirlo a pie juntillas. Vamos a estar vigilantes con este tema que puede afectar gravemente a la salud del personal de la instalación y de las personas usuarias de dicha piscina.

Y recordamos algo muy importante: tolerancia cero ante cualquier peligro que suponga un serio problema para la salud. No sirven medidas urgentes y precipitadas, hay que seguir el protocolo hasta las últimas consecuencias.

este parrafo es fundamental para comprender de lo que hablamos. Esto es un extracto de lo que pusimos en la web en el mes de febrero de este año.

A raíz de nuestra solicitud (expediente 1507917-2017) el servicio de prevención y salud laboral informa:

“se deberá informar a las y los trabajadores de la posible presencia de amianto y de la prohibición expresa de hacer cualquier obra de reparación en la cubierta y evitar reparaciones que tras situaciones extraordinarias se puedan producir sin hacer previamente un plan de trabajo específico para la misma. Prohibido hacerla de manera espontánea y sin aprobación previa del plan”