Ayer, miles y miles de gargantas, mujeres y también hombres, salieron a las plazas de cientos de ciudades y pueblos a gritar con fuerza, con toda la fuerza que se tiene cuando crees firmemente en lo que gritas, en el derecho de las mujeres a su propia emancipación.

Tras los avances conquistados en la larga lucha que las mujeres seguimos manteniendo contra el patriarcado y el machismo, durante siglos, “nuestros derechos no se negocian”.
Como anarcofeministas consideramos que la movilización y la lucha son el único camino para alcanzar ser “socialmente iguales, humanamente diferentes, totalmente libres”.

Las mujeres estamos siendo asesinadas, estamos logrando nuestros derechos con esfuerzo y sufrimiento, mantenemos un firme compromiso de lucha contra el patriarcado y el sistema capitalista cómplice que lo necesita y no vamos a retroceder ante ataques de políticos neofascistas embrutecidos y degradados como seres humanos que consideran a las mujeres como objetos o, en el mejor de los casos, ciudadanas de segunda.
Basta de privilegios machistas, basta de políticos indecentes que mienten sobre la realidad de la violencia machista, sobre el número de mujeres asesinadas, sobre la credibilidad de las denuncias de las mujeres.
Que nadie olvide que las mujeres estamos presentes y vamos seguir estando en la lucha, con la palabra y con la acción.
“Nuestros derechos no se negocian”
“Ni un paso atrás en igualdad”