¿Derechos laborales? Vamos a morir todos.

Según una noticia recientemente publicada en El País, 1418 mujeres han solicitado la baja por dolor menstrual incapacitante en los diez meses que lleva implantado dicho derecho, EN TODO EL ESTADO ESPAÑOL. Esta cifra, queda muy lejos de aquellas hecatombes y predicciones del Nostradamus laborus que vaticinaban llegadas de final del mundo para la patronal.

Al igual que dijese en su día el empresariado con la implantación de la jornada laboral de ocho horas, el descanso semanal, las vacaciones o la abolición del trabajo infantil (si también la patronal en su día dijo que era algo inasumible), la patronal ya pronosticó que la baja por dolor menstrual incapacitante iba a hundir al empresariado.

Dejando al Mostradamus Laborus a un lado, ahora tenemos datos reales, y dato mata relato, tan solo 1418 mujeres, repetimos 1418, han solicitado la baja por dolor menstrual incapacitante en diez meses en TODO EL ESTADO ESPAÑOL, menuda hecatombe. Realmente es una cifra tan ridícula que da que pensar que, ya sea por evitar el estigma o por no ser señalada, hay trabajadoras que son capaces de aguantar dolores incapacitantes con tal de no ser señaladas. A más a más, sabiendo que, en el estado español cerca de un millón de mujeres está diagnosticadas por endometriosis (Asociación de Afectadas de Endometriosis de Aragón)

Esta, es la realidad, esta, es la hecatombe que se cernía sobre el pobre empresariado que, día a día, lucha por conseguir crear puestos de trabajo en pro de la humanidad y el “pogreso”, ah, por supuesto, arriesgándolo todo.